Mostró su fabulosa técnica vocal y su arrolladora personalidad en los principales escenarios europeos del siglo XIX. Se dice de Pauline que tuvo en Liszt a su maestro de piano y al verdadero amor de su vida. Nacida en París e hija del gran tenor sevillano Manuel García, fue la primera extranjera que cantó el repertorio italiano en Rusia. Casada con el hispanista francés Louis Viardot, por su pequeño hotel del Barrio Latino de París pasó lo más florido de la intelectualidad del momento. Tal fue su importancia como intérprete que Frédéric Chopin escribió canciones con el deseo expreso de que fueran cantadas por ella.

Carmen Rodríguez ha invertido cinco años en investigar la vida de esta artista de origen andaluz nacida en París en 1821. Fruto de ese trabajo es Yo, Pauline Viardot (Extravertida Editorial), una biografía novelada escrita en primera persona que rescata del olvido a esta mezzosoprano y compositora que fue, ante todo, una mujer libre obligada a abrirse camino en un ambiente fuertemente conservador que le cerraba puertas por su físico poco agraciado. La obra es, también, un fresco del ambiente del París del Romanticismo, el reflejo de la burguesía europea del XIX- la historia transcurre entre la capital francesa, San Petersburgo, Londres, París, Berlín y Granada- con todas sus contradicciones.

La autora ha presentado la novela en Tomares este jueves en el Restaurante Jaramillo, con organización de la Librería Block. En el acto intervino Riklia Sanchis, directora de la Escuela de Música Albéniz. Sanchis destacó el valor artístico de Pauline y, sobre todo, el valor de la obra de Carmen Rodríguez: “Es muy importante porque habla de una mujer dedicada a la música y las mujeres de ese ámbito han sido históricamente silenciadas”.

Durante la presentación, la autora se detuvo en detalles de la experiencia vital de la protagonista de su novela. Recordó que fue una niña prodigio en el piano y que empezó a cantar al fallecer su hermana, primera figura del bel canto. También habló de las dificultades que tuvo luego para abrirse camino en su carrera por el veto que le imponían las élites culturales de entonces por el “comportamiento liberal” de su marido.  

José María Rodríguez, hermano de la escritora, destacó la calidad literaria de Yo, Pauline Viardot y dio cuenta de la estrecha vinculación de la familia con Tomares. Desveló que Carmen fue “quien desde niña incentivó la lectura entre sus seis hermanos”.

El acto de presentación concluyó con la actuación de la mezzosoprano Aurora Pérez Moruno y de la pianista Lucía Muñoz. Música para celebrar la publicación de esta novela que rescata la historia de quien Clara Schuman dijo: “Es la mujer de más talento que jamás he conocido”.