LLENO TOTAL EN LA FERIA DE TOMARES PARA DISFRUTAR DE EL CANIJO DE JEREZ Y SUS CANCIONES CONTRA EL PESIMISMO
Marcos del Ojo, más conocido como El Canijo de Jerez, hace tiempo que encontró su particular fórmula del éxito: una mezcla bien proporcionada de rock, indie y aires aflamencados con letras canallas que llaman al buen rollo y que recuerdan que, por muy mal que pinten las cosas, siempre hay un motivo para celebrar la vida. Con esa receta se presentó en la noche del Viernes de Feria en Tomares y con ella arrasó ante un público que llenó la Caseta Municipal (no cabía un alma más, literal) y que coreó cada una de sus canciones. Mención aparte merecen los músicos de los que se ha rodeado últimamente, La Banda Magnética, con la que actuó anoche en El Aljarafe. Qué buenos son.
El Canijo fue desgranando durante la velada, sobre todo, piezas gestadas en sus seis años de carrera en solitario: ‘Hola, buenos días’, ‘El hombre garabato’, ‘La nube que más alto vuela’… Sin embargo, tuvo tiempo para alguna concesión a los nostálgicos de los tiempos con El Ratón en Los Delinqüentes. Sus seguidores enardecieron al oír los primeros compases de uno de los grandes éxitos del grupo jerezano: ‘Después’. Y la corearon, como corearon hasta bien entrada la madrugada cada una de sus canciones. Porque el concierto de anoche tuvo ese aire litúrgico de los buenos directos y el de El Canijo y La Banda Magnética fue bueno de verdad. Al de Jerez le sobran el buen rollo, la fuerza y los incondicionales para seguir otros veinte años en la carretera.
Calambres y sus versiones imposibles
El concierto de El Canijo de Jerez no fue el único de la jornada de ayer en la Feria de Tomares. Le precedieron a primera hora de la noche el grupo Calambres, esa formación capaz de insertar letras de toda la vida bien conocidas por el público del Sur entre las notas musicales del rock and roll anglosajón más clásico y con más pellizco. Versiones imposibles las llaman ellos mismos. Para muestra, su fusión de ‘Mírala cara a cara’ con los acordes del célebre ‘Sweet home Alabama’, de Lynyrd Skynyrd, y el ‘Rosa María’ que popularizó Camarón con la música de ‘Roxanne’ de Police.
Tras Calambres y El Canijo de Jerez fue turno de la banda Autoreverse, cuyas versiones de clásicos del rock nacional e internacional (Loquillo, Bon Jovi, Lenny Kravitz, Beatles, B.52…) hicieron bailar al público de la Caseta Municipal casi hasta el alba.
Estos conciertos forman parte del amplio programa musical que el Ayuntamiento de Tomares ha preparado para la Feria 2019. Serán unos veinte conciertos, todos ellos gratuitos, en la Caseta Municipal del Real.