Una importante intervención que empezó justo hace un año, el pasado 22 de enero 2020, y en la que la Junta ha invertido un presupuesto cercano al medio millón de euros. Unas obras muy esperadas por los vecinos y por el propio Ayuntamiento de Tomares, que llevaban doce años reivindicando una vivienda digna y una solución para los vecinos, cuyas casas arrastraban graves deficiencias como cornisas en peligro de desprendimiento, humedades, pérdidas constantes de suministro eléctrico, fachadas y carpinterías de las ventanas deterioradas, e incluso formación de balsas de agua en época de lluvias. En definitiva, problemas estructurales y cuestiones básicas para que una vivienda sea digna y de calidad, y que ya están solucionados.

Durante la inauguración, el alcalde, José Luis Sanz, ha destacado que “hoy es un día muy importante para todos los vecinos de Tomares y los vecinos de La Cepa, pues la Junta de Andalucía ha puesto fin a una reivindicación histórica que llevaban esperando los vecinos desde hace más de 12 años, y que nunca había tenido respuesta”.

Por su parte, la consejera de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, Marifrán Carazo, ha agradecido y felicitado al alcalde “por el gran trabajo que está desarrollando en Tomares, un trabajo transformador, porque Tomares avanza, continúa transformándose y situándose a la vanguardia para prestar los mejores servicios, y cuenta Tomares con la alianza del gobierno de la Junta de Andalucía para que, en base a la cooperación y lealtad institucional, ayudar a esos avances. Hoy tenemos el primer reflejo en la finalización de la reforma integral de estas viviendas, con sello verde, que va a mejorar la calidad de vida de sus vecinos, les va a permitir un buen ahorro en su factura de la luz y una menor emisión de CO2 cuidando por nuestro entorno”.