La Junta de Andalucía ha reanudado las obras de la Rehabilitación de las 30 VPO de la Plaza de La Cepa que comenzaron el pasado 22 de enero. Unas obras que han tenido que paralizarse debido a los protocolos de seguridad exigidos por las autoridades sanitarias que no permitían las actuaciones en el interior de edificios habitados.

Esta intervención era muy esperada por los vecinos y por el Ayuntamiento, que llevaban doce años reivindicando una solución para las graves deficiencias que presentan estas casas y que cuando se finalicen van a contar por fin con una vivienda digna. Un proyecto que echó a andar gracias al gobierno de la Junta, presidido por Juanma Moreno.

La rehabilitación cuenta con un presupuesto cercano al medio millón de euros para solucionar los problemas que presentan las casas afectadas, como cornisas en peligro de desprendimiento, humedades, pérdidas constantes de suministro eléctrico e incluso formación de balsas de agua en época de lluvias. Terminadas las obras de sustitución de las cubiertas, la siguiente actuación será el arreglo de las carpinterías de las ventanas.

Doce años de espera

La Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía (AVRA), órgano de la Junta de Andalucía responsable de las viviendas de titularidad pública de La Cepa, no dio solución alguna a los problemas que éstas presentaban pese a los numerosos informes técnicos que, a lo largo de los años, han alertado de su mal estado.

Sin embargo, tras doce años de espera, en los últimos tiempos se han venido dando pasos para solucionar la situación. En mayo de 2019, la secretaria general de Vivienda de la Junta de Andalucía, Alicia Martínez, visitó la zona acompañada por el alcalde de Tomares, José Luis Sanz. Ese día se comprometió ante los vecinos a licitar el proyecto de rehabilitación. En septiembre, la Agencia Pública de Rehabilitación y Vivienda de Andalucía llevaba ya a cabo la licitación anunciada y poco después, el Ayuntamiento declaraba las obras de rehabilitación energética de las viviendas como de Especial Interés, contemplando una bonificación del 95% de la tasa y del ICIO, de la Licencia de Obras.  

El proyecto

El proyecto prevé paliar el problema de las humedades, reparar las fachadas y la carpintería de las ventanas, sustituir el cableado, solucionar los problemas estructurales; en definitiva, todas esas cuestiones que son básicas para que una vivienda sea digna y de calidad. Con esta inversión, el edificio con 30 VPO de La Cepa se pondrá al mismo nivel que el del resto de Tomares.

La ejecución del proyecto implica la sustitución de cubiertas y el incremento de los niveles de aislamiento general mediante Sistemas de Aislamiento Térmico Exterior (SATE). La obra se completa con reparaciones y mejoras en zonas comunes, la sustitución de sistemas de iluminación y la eliminación de barreras arquitectónicas en los accesos. Con esta actuación se persigue la reducción en un 30 por ciento de los niveles de consumo de energía primaria no renovable y de las emisiones de CO2, consiguiendo además la mejora de la calificación energética de cada una de las viviendas y su revalorización.

También se contempla la instalación de sensores de temperatura que permitirán evaluar el éxito en la reducción de emisiones y de consumo de acuerdo con los parámetros exigidos por el programa operativo FEDER.