Joaquín Manzano Vega anuncia el Rocío 2017
El Rocío ya está a la vuelta de la esquina. En poco más de dos semanas, el martes 30 de mayo, los rocieros tomareños emprenderán cargados de ilusión el camino para reencontrarse en la Aldea con la Virgen del Rocío.
Un año más, cuando se acerca la romería, se intensifican los actos preludio de la romería. Así, Tomares ha vivido una semana repleta de actos rocieros, con el Triduo, que comenzó el jueves 11 y se prolongó hasta el sábado, con la presentación del cartel, una magnífica pintura obra del artista José María Carrillo Castillo, y se cerró el domingo, 14 de mayo, con la Función Principal de Instituto, en la que juraron los nuevos hermanos, y el Pregón.
El pregonero de este año ha sido Joaquín Manzano Vega, capataz de la Hermandad Sacramental, que fue presentado por Belén Herrera, quien emocionada agradeció a sus padres que le inculcasen esos lunes de Pentecostés, porque “El Rocío no sería lo mismo sin nuestros familiares y amigos”. Belén, amiga de Joaquín desde la infancia, destacó del pregonero su compromiso con Tomares y con las dos hermandades.
Joaquín Manzano Vega pronunció un pregón muy íntimo cargado de referencias familiares y repleto de ilusión ya que, como dijo, su pregón estaba teñido del rojo y azul de la Hermandad del Rocío en sus venas y de “la ilusión de una familia hecha carriola” para encontrarse con la Virgen.
El acto, que estuvo presidido por el alcalde de Tomares, José Luis Sanz, el párroco, Gregorio Sillero, y el Hermano Mayor de la Hermandad del Rocío de Tomares, Hipólito Jiménez, contó con la participación musical de un coro de Gines integrado por amigos del propio pregonero y por el Coro del Rocío de Tomares, que acompañaron a Manzano en su intervención en la que fue desgranando su experiencia rociera en la que “nacer y crecer en el camino es una de las cosas más bonitas”.
Tras finalizar el pregón, Hipólito Jiménez, que este año vivirá su primer Rocío como Hermano Mayor, agradeció a la presentadora y pregonero sus intervenciones y les entregó un recuerdo. A continuación, el acto se cerró con el público y los dos coros en pie cantando las salves rocieras de Gines y Tomares.