EVA DÍAZ PÉREZ: “HE ENCONTRADO AL VERDADERO NEBRIJA EN LOS PRÓLOGOS DE SUS OBRAS”
Dos interesantes propuestas han ocupado las horas centrales de la tarde de hoy en la Feria del Libro de Tomares. Por un lado, Eva Díaz Pérez ha presentado al público su obra El sueño del gramático, con la que rinde homenaje al humanista Elio Antonio de Nebrija en el V aniversario de su fallecimiento.
La autora ha señalado que “este libro me ha llevado cinco años de investigación y trabajo en los que he aprendido muchísimo. He encontrado al verdadero Nebrija en los prólogos de sus obras, donde se revela como un hombre muy cervantino y como un gran arrogante, que se vanagloriaba de haber sido el primero en poner tienda de latinidad en España”.
Para Díaz Pérez, “una de las cosas más fascinantes de Nebrija es que, consciente de la corrupción que había padecido el latín al dejar de hablarse cotidianamente y restringirse al ámbito académico, quiso impedir que con el castellano ocurriera lo mismo y escribe una gramática con la que logra dotar a la lengua del prestigio científico necesario para evitarlo”.
La escritora ha señalado además que, “Nebrija fue un hombre muy reconocido y celebrado en su época, y ha seguido siendo objeto de estudio por los especialistas. Sin embargo, no es tan conocido para el gran público. La novela histórica rigurosa debe, en mi opinión, incitar al lector a seguir leyendo sobre el tema del que trata, pero ya en el plano de historiadores e investigadores. Ese es mi objetivo, que la novela tenga un dimensión divulgativa”
La hora de la novela negra
Por otro lado, los aficionados a la novela negra han tenido la ocasión de encontrarse hoy en Tomares con una de las escritoras más brillantes del género en el panorama actual. Se trata de Susana Martín Gijón, creadora de dos de las sagas policiacas más exitosas de los últimos tiempos, como son Más que cuerpos y la protagonizada por la inspectora Camino Vargas, cuya última entrega ha presentado en la Feria del Libro.
Martín Gijón ha manifestado que “la denuncia social es algo intrínseco a mi condición de escritora y eso se refleja en mis libros. Planeta es mi décima novela y el compromiso social siempre ha estado ahí. Para mí, el relato de la realidad, de las cosas que me preocupan, es importante. La presión asociada a la maternidad, el maltrato animal y ahora el cambio climático, eran temas que me apelaban especialmente como para sumergirme en ellos, aprender y mostrar lo aprendido a los lectores a lo largo de estos tres libros”.
La escritora ha añadido que “mis novelas cambian a mis protagonistas, pero también a mí, porque me implico absolutamente en el proceso creativo. Por ejemplo, mientras escribía Especie dejé de comer carne y me convertí en vegana. Soy de las que se obsesionan con la novela y estoy dándole vueltas las 24 horas porque quiero que todo quede bien atado”.
Más de cuarenta mil ejemplares vendidos de las otras dos entregas de la trilogía, Progenie y Especie, avalan una trayectoria ampliamente reconocida por la crítica y por los lectores.