Tomares recibió la tarde del 3 de enero la visita del Heraldo Real, encarnado por el vecino Joaquín Salmerón, como preludio a la tan esperada Cabalgata de Reyes Magos del 5 de enero, el día más mágico del año.

Emoción y expectación, la que sintieron cientos de vecinos de todas las edades, por ver al embajador de Sus Majestades de Oriente en su recorrido a caballo por las principales calles de Tomares, junto a su espectacular comitiva, repartiendo caramelos y regalos a su paso.

El cortejo, formado por  una veintena de beduinos a caballo y la Banda del Santísimo Cristo de los Remedios de Castilleja de la Cuesta, escoltó al emisario de los Reyes Magos hasta las puertas del Ayuntamiento, donde el alcalde, José María Soriano, le entregó las Llaves de la Ciudad para que Melchor, Gaspar y Baltasar pudieran entrar en las casas de todos los vecinos para dejar sus regalos. Un acto simbólico, cargado de ilusión, con el que disfrutaron niños y mayores.