La Feria del Libro de Tomares ha celebrado hoy una mesa redonda en torno a la figura de Antonio de Nebrija como parte de las actividades previstas en una edición dedicada a este personaje trascendental de la cultura española. Juan Gil y Rafael Cano, con Antonio Narbona como moderador del acto, han analizado, en este interesante encuentro, la vida y el legado lingüístico del autor de la primera gramática castellana.

Para Juan Gil, catedrático emérito de Filología Latina de la Universidad de Sevilla, miembro numerario de la RAE y autor del libro Antonio de Lebrija. El sabio y el hombre, “Lebrija fue el gramático por excelencia, entendiendo por ello al latinista por excelencia. A su regreso de Bolonia, entusiasmado por el humanismo, por el latín y por el nuevo mundo que está naciendo en Italia, intenta implantar ese mismo modelo en España y lo hace alzándose contra los mamotretos gramáticos de la época. Por eso escribe una gramática sencilla, casi un folletito, con el que intenta despejar el enredado sistema que hacía imposible la enseñanza del latín”.

Por su parte, el catedrático emérito de Lengua Española de la Universidad de Sevilla y miembro de la RAE, Rafael Cano, ha señalado que “se trata de una figura absolutamente relevante en la historia de la cultura,  de la ciencia y de la gramática españolas, con un pensamiento muy fundamentado sobre una base científica y también política. Sus escritos en lengua castellana ocupan apenas un 5% del total de su obra, pero ha pasado a la historia por el carácter revolucionario de los mismos y por su capacidad para convencer a los Reyes Católicos de la necesidad de fijar la gramática de la lengua, considerada entonces, vulgar”

El romanticismo de Mega Maxwell

Gramática y humanismo no son los únicos temas de los que se ha hablado hoy en la cita literaria tomareña. La reconocida autora de novela romántica, Megan Maxwell, ha presentado en el Auditorio Municipal la séptima entrega de su serie “Las guerreras de Maxwell”, que lleva por título Atrévete a retarme, ambientada en los espectaculares paisajes escoceses.

Maxwell ha manifestado que “las guerreras son mujeres del siglo XIII frescas y descaradas, algo difícil en aquella época, pero es precisamente eso lo que me interesa de ellas. En ellas vuelco todo el morbo y la fantasía que tengo y me divierte escribir sus aventuras, aunque a los puristas de la novela medieval no les gusten mis personajes”.

La autora ha añadido que “con el éxito de Pídeme lo que quieras me di cuenta de que a la gente le gusta más el morbo de lo que pensaba, pero no sólo escribo novela erótica. Tengo 42 libros publicados y sólo diez pertenecen a este género. Lo que sucede es que el sexo sigue siendo un tabú y por eso llama más la atención”.